miércoles, 27 de noviembre de 2013
Protagonista espectadora
Entro
a la habitación. Diviso una silueta en la penumbra. Somnolienta y confundida
reveo la escena. Algo está mal…
El
corazón me late con prisa furiosa, como si fuera a salir corriendo de mi cuerpo
inmóvil. No puedo mover si quiera una pestaña…estoy de pie, junto a la puerta,
obligando a mis pupilas a esforzarse para ver entre la escasa luz del ambiente.
Finalmente lo logran, la silueta sombría se va rellenando, poco a poco, dejando
ver los rasgos de mi rostro. Sí, mi rostro. Soy yo. La misma la que yace en mi
cama mientras permanezco de pie observándome. Acaso ¿estoy muerta?
Montones
de interrogantes me acechan. Se retuercen en mi vientre posibilidades
siniestras. Comienzo a dudar si realmente
me levanté para ir al baño. ¿Cómo lo compruebo?, ¿cómo sé que no es parte de un
sueño incluso el pellizco que me di para despertar?
Pienso
con velocidad, busco auxilio entre los parámetros de la razón y solo encuentro
más y más desesperación. Tengo que hacer algo… tengo que acercarme a ella... ¿a
ella?, ¿acaso estoy refiriéndome a mi misma en tercera persona? Siento que
estoy a punto de enloquecer.
Me
acerco muy despacio, la examino con cuidado. Tengo que saber si ella… mi otro
yo, realmente es ella y está ahí ahora.
Me
aproximo más, lentamente... Su posición indica que está sumida en un profundo
sueño, solo si pienso en positivo... verdaderamente no estoy segura de que esté
viva.
Me
posiciono con miedo a escasos centímetros de su cara. Entonces logro sentir su respiración… Qué alivio… no está muerta. No estamos muertas. ¿Entonces quién
soy yo?, ¿soy esta o aquella?
Tengo
que despertarla y resolver este asunto. Tal vez ella lo sepa todo…
Se
estremece cada centímetro de mi cuerpo cuando envío a uno de mis dedos a hacer
contacto. Punzo su brazo despacio y el mío es punzado también. Salto de espanto
y registro la alcoba completa, ya con la vista entrenada como un halcón. No hay
nadie más…
Tomo
unos segundos para que desciendan mis pulsaciones y otra vez lo intento. Paso
mi mano por su rostro y repercute en el mío. Pruebo tocando su pierna y luego
su espalda y cada contacto se reproduce en mi cuerpo como un espejismo. Sollozo
nerviosa, atónita… mientras ella ni se inmuta. Pero respira… lo siento…
Es
excesivo para mi mente. Me apresa un colapso de ira y le jalo el cabello con
fuerza. Una nebulosa negra estalla y todo se desdibuja. No veo nada… Abro los
ojos, los cierro y nada…es todo negro.
Escucho
silencio, mucho silencio… Abro los ojos de nuevo. ¡Me asusto! Estoy en otro
lugar.
Veo desde otra perspectiva, desde la de ella,
que ahora soy yo… Estoy en la cama y lo entiendo todo. Fue culpa de un sueño.
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14 comentarios:
FULLL, MUY INTERESANTE E INTRIGANTE TEXTO.
UN ABRAZO
Muy buen relato Paula, siempre resulta interesante el mundo de los sueños
un abrazo
saludos
No estáis muertas.
Aún.
Hola Paula,gracias por tu visita a mi blog.
Un relato muy bien llevado que mantiene al lector en vilo ante un fenómeno que más de uno hemos imaginado alguna vez,el poder desdoblarnos.Sería horroroso por eso es mejor que acabe todo siendo un mal sueño.
Saludos cordiales.
Un sueño o un viaje astral. Algunas personas dicen vivir esas experiencias incluso de forma voluntaria. No me importaría probar.
Un abrazo
lindo texto por lo real una vez me pasó beso
Un relato que atrapa, Paula. Escribes genial.
Un abrazo y... gracias
Buen relato, mantienes al lector en suspense hasta el final. Me ha encantado.
Gracias por tu visita a mi blog.
Un abrazo
Muchas gracias Paula...tu blog es precioso e interesante. Felices fiestas navideñas. Un abrazo.
¡Hola, Paula!
¡Pues mira que ya es raro... o coincidencia! Yo tuve un sueño igualito! Hace unos años. Yo esta ahí al pie de la cama mirándome a mi misma. Después de haber corrido por los caminos de mi aldea hasta el cementerio, dando por allí un paseo, me dije aquí no tengo casa, me di vuelta y no corría que volaba, por los mismos caminos hasta llega a mi cuarto, donde yacía me cuerpo no sé si vivo o muerto. Siempre me quedó la duda de, si el alma se puede separar del cuerpo mientras dormimos!... unos instantes para dar un recorrido por algún sitio. En aquel momento me desperté con un estremecimiento. Nunca olvidé ese sueño.
Gracias por compartir tus bonitas letras.
Un abrazo y felices fiestas.
Interesante relato Paula,te dejo un abrazo con mis mejores deseos para estas fechas tan entrañables, feliz Navidad!!, feliz año 2014!!.
El portal de los sueños muchas veces es solo el reflejo de nuestro ser. Aprovecho para dejarte un abrazote y desearte un espectacular 2014.
BUENISIMO!
Besotes
La magia de sentir palabras se reduce a la magia de sentir tus palabras.
Descubro tu blog y me apresuro a seguirte. de paso, con anhelo, la invito para que venga a mi blog, te apuntes y nos sigamos.
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